Estacionamos el auto en medio de la noche, cerca de una esquina olvidada por el tiempo, en el centro cuarteado de la ciudad. Bajamos: Venustiano, Ruperto y yo. Yo iba en el asiento posterior mientras Venustiano manejaba y Ruperto de copiloto. Bajamos y sonaron los tres portazos: pla, pla y pla. Iba nervioso, por alguna razón la humedad de la ciudad daba la impresión de corroerlo todo. Mis amigos empezaron a caminar, abandonándome, dejándome a la desidia de la ciudad cuarteada y vacía; hueca como un gran muerto que aún dormita en ella. Los pasos húmedos empezaron a tomar rumbo. Íbamos al PALL’S; un table, prostíbulo de lujo. Ya tenía dieciocho años, pero era la primera vez que había tomado la decisión de entrar a uno de estos lugares. Ruperto, por el contrario, aunque era un año más joven que yo, ya conocía todos los sitios habidos y por haber en la ciudad. Por qué no decirlo, estaba muy nervioso. Venustiano ya había venido varias veces, estaba acostumbrado, así que para él era muy normal acercarse a la puerta llena de figuras exóticas; de luces y sombras; de mujeres desnudas. Los dos parecían estar enamorados de Casandra. Fue por eso que quise venir. Me dijeron que era la mujer más hermosa sobre la Tierra, y yo les creí. Quería acreditarlo, quería verla, quería demostrarme que había más mujeres además de las que conocía; una que fuera apasionada, sensual; una que deseara a un hombre solamente porque le apetecía, sin esperar algo que un hombre no pudiera dar; que quisiera dinero, y solamente eso. Una mujer hermosa que nos comprendiera sólo porque sí. Mis amigos me aseguraron que Casandra era como una especie de santo grial. Estábamos cansados de las muchachas de la carrera, insípidas; quienes buscaban un padre de familia, de las que no arriesgarían nada; daba la impresión de que ellas más bien se conformaban con un mayordomo, un esclavo, un muerto. Por eso fui, para estar con una mujer que aceptara a los hombres tal y como realmente somos: lujuriosos, materialistas, cobardes, perdedores, simples bestias sumisas. Seguir leyendo
Author: Alfredo Loera
La teoría de la narración de Paul Ricoeur en la cuentística de Eduardo Antonio Parra
Una de las principales cualidades de la cuentística de Eduardo Antonio Parra es el diálogo que hace con lo simbólico y lo mítico. En textos como “La piedra y el río” se genera una elaboración de este tipo, a pesar de que su narración está hecha desde lo histórico concreto. Es decir, sus cuentos forjan un marco de verosimilitud en relación con una referencia extraliteraria específica, a saber, las comunidades del Norte de México, que sin embargo se disloca en una configuración metafórica mucho más expresiva. Seguir leyendo
Polvo de ángel
Ya tenía mucho sin saber de Alan, ignoraba dónde estaba metido. Esta noche tal vez podría encontrarlo.
Como siempre, regresó a las 5 de la mañana. Bajó de su taxi para deslizarse por la calle desierta hasta entrar a su casa. Iba jadeante, sin saber si era por miedo o por alegría. Le sudaban las manos con la camisa húmeda a pesar de la noche fresca. Temblaba tal vez porque el sudor hacía que el frío se sintiera más en su cuerpo delgado o porque se moría de los nervios. Anteriormente, había metido la llave en la cerradura con la esperanza de que por primera vez, en varios meses, no estuviera corrido el pasador; sin embargo, otra vez, como siempre, tuvo que dar tres vueltas a la llave para abrir la puerta. Seguir leyendo
Para decir adiós, un monólogo y algunas tecnologías
El sábado 17 de junio se presentó la obra Para decir adiós del dramaturgo Alejandro Licona en el auditorio del Museo Regional de la Laguna. La dirección y actuación estuvo a cargo de Perla Valles. Éstas son algunas reflexiones al respecto. Seguir leyendo
La lectura como un acto libertador
Más de una ocasión he escuchado que la lectura libera, que da a los lectores una posibilidad de mundo más amplia o que incluso puede asistir en los quehaceres de la vida. Llevo ya algún tiempo leyendo libros y revisando cómo la lectura de esos libros ha cambiado mi espectro de pensamiento. Me he preguntado si en verdad en mi experiencia personal ha ocurrido una mejora a causa de este hábito (como se dice tantas veces en la promoción del mismo). También, he observado (casi que espiado) a otras personas que son lectores y que sin duda han leído mucho más que yo. Los escucho, me relaciono con ellos y del mismo modo me he preguntado qué tanto dichas personas son más libres que alguien que no lee. Seguir leyendo
Teoría y Praxis del Maestro
El sábado 3 de junio hubo una plática impartida por el maestro Luis de Tavira en el teatro Alfonso Garibay. Por la noche se realizó la segunda presentación de El corazón de la materia en la ciudad de Torreón. Estas son algunas reflexiones al respecto. Seguir leyendo
Thomas Mann: la novela clásica europea
Desde hace poco se habla de la caída de Occidente. Las nuevas crisis sociales y culturales plantean el hecho de que los valores de la modernidad europea hace tiempo dejaron de ser hegemónicos. El proceso quizá lleve más de lo que pensábamos.
Juan Rulfo
Lo leí en la adolescencia. Recuerdo que compré Pedro Páramo en la Soriana. Años después, ese volumen se lo regalé a una mujer, quería que lo leyera. ¿Será redundante comentar el deslumbramiento que me causó la novela? Quizá lo que más me sorprendió fue el lenguaje. En mi experiencia los libros tenían una lengua distante, una lengua que no me pertenecía. But many have claimed that this formula is able to increase purchase levitra quality as well as enhance men’s appetite. Some benefits of ordering viagra online include firm and long lasting erection , restoration of self- esteem , passionate moments etc. This is because parents are concerned about preventing early sickness or ailments in their child’s life. discount sildenafil Additionally, some patients experienced pruritus (strong itch), urticaria (hives), testicular viagra sale buy pain and swelling of the lips and face and Testicular pain. Pedro Páramo engendró en mí la escritura y me hizo creer en los libros, lo cual ya es mucho. Pareciera que nada más puede decirse de este autor que no se haya dicho de mejor manera. Alfonso Reyes comentaba que después de escuchar un gran poema sólo queda el silencio. Y así pasa cuando uno termina de leer Pedro Páramo.
El Villismo
Martín Luis Guzmán y José Vasconcelos quizá sean los escritores que tuvieron mayor autoridad para escribir sobre el Villismo. Fueron contemporáneos del caudillo y participaron en esa única épica de nuestro país que fue la Revolución Mexicana. Desde que tengo memoria siempre tuve una gran simpatía por el Centauro del Norte. Si me lo preguntan, considero que es uno de los personajes más simbólicos de nuestra cultura, porque emana de ella, con todas sus contradicciones, de una manera auténtica. Por otra parte, considero que el personaje de Villa es en muchos aspectos uno de los arquetipos del mexicano, así como Aquiles u Odiseo lo fueron de la cultura griega; el Mío Cid de la española, o Sigfrido de la germánica. Pero quizá el problema más relevante para la conformación de nuestra identidad es que Villa más que un héroe es un antihéroe. Si hiciéramos un análisis de su vida es muy probable que simbólicamente se asemejara más al Quijote o a Sancho Panza, que a cualquiera de los héroes épicos. Sucede así porque Villa es el producto de lo moderno. Seguir leyendo
El hombre rebelde y los nuevos totalitarismos (parte II)
Albert Camus abre El hombre rebelde con el siguiente párrafo:
Hay crímenes de pasión y crímenes de lógica. El Código Penal los distingue, asaz cómodamente, por la premeditación. Vivimos en la época de la premeditación y del crimen perfecto. Nuestros criminales ya no son aquellos jovenzuelos desarmados que invocaban la excusa del amor. Por el contrario, son adultos, y su coartada es irrefutable: es la filosofía, que puede servir para todo, hasta para transformar a los criminales en jueces.